La energía producida por el movimiento de partículas cargadas se llama energía eléctrica. Implica el flujo de carga eléctrica, generalmente en forma de electrones, a través de un conductor. Dispositivos como baterías, generadores y células solares convierten otras formas de energía en energía eléctrica. Esta energía se utiliza ampliamente en diversas aplicaciones, como la alimentación de dispositivos electrónicos, iluminación, calefacción y maquinaria industrial. El flujo de corriente eléctrica y la energía eléctrica resultante se rigen por leyes fundamentales del electromagnetismo, como la ley de Ohm y las leyes de Kirchhoff.