2. Penetración de humedad: Las gotas de agua del vapor actúan como depósitos microscópicos que transportan calor profundamente a la piel y los tejidos. Se condensan instantáneamente (vuelven a convertirse en agua) al entrar en contacto, lo que permite una transferencia de calor significativa antes de evaporarse o enfriarse.
3. Riesgos por inhalación: Dado que el vapor se transporta por el aire, existe el riesgo de inhalarlo y quemar las delicadas membranas mucosas de la boca, la garganta y las vías respiratorias. Las lesiones por inhalación empeoran las enfermedades respiratorias, especialmente las afecciones que implican el estrechamiento de las vías respiratorias, y pueden provocar complicaciones respiratorias a largo plazo.
4. Escaldado :El contacto con el contenido de humedad extremadamente caliente del vapor provoca quemaduras en la superficie inmediata de la piel.
Recuerde, incluso una breve exposición al vapor intenso puede provocar quemaduras de segundo grado en tan solo tres segundos. Tenga siempre extrema precaución cerca de aparatos que produzcan vapor o cuerpos de agua calientes para evitar este tipo de quemaduras graves.