1. Aumento de las compras online :La pandemia aceleró el cambio hacia las compras en línea, lo que provocó un aumento significativo de las ventas del comercio electrónico. Como resultado, los estados que dependen en gran medida de los ingresos por impuestos sobre las ventas vieron un aumento en su recaudación de impuestos por compras en línea.
2. Contribuyentes de altos ingresos :La pandemia afectó desproporcionadamente a personas e industrias de bajos ingresos como la hotelería y el comercio minorista, mientras que aquellos con ingresos más altos se vieron relativamente menos afectados. Como resultado, los contribuyentes de altos ingresos continuaron pagando impuestos sobre la renta y contribuyendo más a los ingresos fiscales estatales.
3. Medidas de estímulo estatal :Algunos estados promulgaron medidas de estímulo y pagos directos para apoyar a personas y empresas durante la pandemia. Estas medidas inyectaron dinero a la economía y pueden haber aumentado indirectamente el gasto de los consumidores y los ingresos fiscales.
4. Fondos de ayuda federal :El gobierno federal brindó una importante asistencia financiera a los estados a través de la Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica por el Coronavirus (CARES) y paquetes de estímulo posteriores. Estos fondos ayudaron a muchos estados a compensar las pérdidas de ingresos y mantener servicios esenciales, reduciendo la necesidad de aumentar los impuestos.
5. Impuestos del Seguro de Desempleo (UI) :Si bien el empleo general disminuyó durante la pandemia, hubo un aumento en las solicitudes de desempleo. Esto condujo a mayores ingresos fiscales por UI para los estados.
6. Venta de artículos de lujo :A pesar de la recesión económica, las ventas de artículos de lujo, como automóviles y barcos de alta gama, se mantuvieron fuertes durante la pandemia, generando mayores ingresos por impuestos sobre las ventas para algunos estados.
7. Recortes presupuestarios estatales :Algunos estados implementaron recortes presupuestarios para abordar la escasez de ingresos. Estas medidas de ahorro de costos pueden haber dado como resultado tasas impositivas efectivas más altas, ya que la reducción del gasto público condujo a un denominador más pequeño en el cálculo de las tasas impositivas.
Es importante señalar que el impacto de la pandemia en los ingresos tributarios estatales varió entre los diferentes estados y dependió de su estructura económica, su dependencia de fuentes tributarias específicas y la efectividad de sus políticas fiscales durante la crisis.