Microsoft entró en el mercado de reproductores multimedia portátiles en 2006 con el lanzamiento de Zune. El Zune fue diseñado para competir con el iPod, que dominaba el mercado en ese momento. El Zune tenía algunas características innovadoras, como la capacidad de sincronizarse de forma inalámbrica con una PC y un servicio de música por suscripción llamado Zune Pass. Sin embargo, el Zune nunca alcanzó el mismo nivel de popularidad que el iPod y Microsoft descontinuó la línea de productos en 2012.
Hay varias razones por las que el Zune no pudo competir con el iPod. Una razón es que el iPod tenía la ventaja de ser el primero en actuar. Apple lanzó el iPod en 2001, y cuando se lanzó el Zune en 2006, el iPod ya estaba bien establecido en el mercado. Otra razón del fracaso del Zune es que no estaba tan bien integrado con Windows como el iPod con Mac OS X. El Zune también carecía de algunas de las características que los usuarios de iPod esperaban, como la capacidad de reproducir vídeos.
En 2017, Microsoft anunció que descontinuaría el software Zune. Esta fue una señal más de que Microsoft estaba renunciando al mercado de reproductores multimedia portátiles. Desde entonces, Microsoft ha cambiado su enfoque a otras áreas, como la computación en la nube y la inteligencia artificial.
El Zune es un recordatorio de que incluso una empresa grande y exitosa como Microsoft puede fracasar cuando ingresa a un mercado que ya está dominado por un operador fuerte. El iPod estableció el estándar para los reproductores multimedia portátiles y el Zune nunca pudo superar ese liderazgo.