Un cambio químico ocurre cuando cambia la composición química de una sustancia. Por ejemplo, cuando quemas un trozo de papel, el papel sufre un cambio químico y se convierte en ceniza.
Cuando abres una lata de refresco, no estás cambiando la composición química del refresco. El refresco todavía está formado por las mismas moléculas que tenía antes de abrir la lata.
Lo único que cambia cuando abres una lata de refresco es el estado físico del refresco. El refresco pasa de líquido a gas. Este es un cambio físico, no un cambio químico.