El estado de la materia en el que las moléculas están muy juntas se llama sólido. En un sólido, las moléculas se mantienen unidas mediante fuertes fuerzas intermoleculares, como enlaces covalentes o enlaces iónicos. Esto hace que las moléculas estén muy juntas, con muy poco espacio entre ellas. Como resultado, los sólidos tienen una forma y un volumen definidos y no se deforman fácilmente.