1. Observación directa:
* forma: Incluso a simple vista, el sol aparece como un disco redondo. Esto se confirma aún más por los telescopios, que proporcionan una vista más clara.
* sombras: El sol arroja sombras redondas, lo que solo sería posible si la fuente de luz en sí fuera redonda.
* eclipses solares: Durante un eclipse solar total, la luna cubre el sol por completo, revelando su forma perfectamente redonda.
2. Comprensión científica:
* Gravedad: El sol es una bola de gas gigante mantenida por su propia gravedad. La gravedad tira de la materia hacia el centro, creando una esfera como la forma más estable.
* Rotación: El sol gira y su rotación haría que se aplane si no fuera redondo.
* Otras estrellas: Observamos innumerables estrellas en el universo, y todas parecen redondas. Esto sugiere que la redondez es una característica común de los cuerpos celestes.
3. Observaciones de la nave espacial:
* Imágenes de la nave espacial: Las imágenes de las sondas espaciales como el Observatorio Solar y Heliosférico (SOHO) muestran la forma redonda del sol con gran detalle.
Por lo tanto, tenemos una comprensión fuerte y multifacética de que el sol es realmente redondo.