1. Ambiente:
* Tierra: Nuestro planeta tiene una atmósfera gruesa compuesta principalmente de nitrógeno y oxígeno. Esta atmósfera actúa como una manta, atrapando el calor irradiado por la superficie y evitando el enfriamiento rápido por la noche. El efecto invernadero, causado por gases como dióxido de carbono y metano, contribuye aún más a la retención de calor.
* luna: La luna prácticamente no tiene atmósfera de la que hablar. Sin una manta atmosférica, la superficie irradia el calor directamente hacia el espacio, lo que lleva a un enfriamiento rápido.
2. Composición y superficie:
* Tierra: La superficie de la Tierra está cubierta principalmente de agua, que tiene una alta capacidad de calor. Esto significa que se necesita mucha energía para calentar el agua, pero también libera esa energía lentamente. La presencia de masas de tierra con terreno variable también afecta la distribución del calor.
* luna: La superficie de la luna está compuesta principalmente de regolito rocoso, que tiene una baja capacidad de calor. Esto significa que se calienta rápidamente durante el día, pero se enfría tan rápido por la noche.
3. Fuente de calor interno:
* Tierra: La Tierra tiene un núcleo fundido que genera calor interno, contribuyendo a la temperatura general del planeta.
* luna: La luna tiene un núcleo mucho más pequeño y está geológicamente inactivo. Esto significa que se basa únicamente en fuentes externas de calor, principalmente el Sol.
4. Rotación:
* Tierra: La rotación de la Tierra permite una distribución más uniforme de la energía solar, y algunas áreas reciben luz solar mientras que otras están en la sombra. Esto ayuda a regular las fluctuaciones generales de temperatura.
* luna: La luna gira mucho más lenta, lo que resulta en períodos significativamente más largos de luz solar y oscuridad. Esto conduce a una temperatura extrema entre los dos extremos.
En resumen, la atmósfera de la Tierra, la cobertura del agua, el calor interno y la rotación contribuyen a su capacidad para retener el calor y evitar el enfriamiento rápido por la noche, a diferencia de la luna.