A principios de 2008, Microsoft hizo una oferta no solicitada para adquirir Yahoo por 44.600 millones de dólares. El acuerdo fue visto como una forma para que Microsoft impulsara su posición en los mercados de publicidad y búsqueda en línea, donde estaba rezagado respecto de Google. Sin embargo, el acuerdo enfrentó un importante escrutinio regulatorio, particularmente por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) y la Comisión Europea (CE).
El Departamento de Justicia expresó su preocupación de que el acuerdo perjudicaría la competencia en los mercados de publicidad y búsqueda en línea. La CE compartió estas preocupaciones y también expresó su preocupación por el impacto del acuerdo en el mercado de publicidad gráfica en Internet.
En noviembre de 2008, el Departamento de Justicia presentó una demanda para bloquear el acuerdo. La demanda alegaba que el acuerdo "reduciría significativamente la competencia" en los mercados de publicidad y búsqueda en línea. La CE hizo lo mismo en diciembre de 2008 y presentó un pliego de cargos en el que exponía sus preocupaciones sobre el acuerdo.
Microsoft y Yahoo respondieron a las preocupaciones regulatorias proponiendo una serie de concesiones, entre ellas:
* Vender el negocio de búsqueda de Yahoo a un tercero
* Licencia de la tecnología de búsqueda de Yahoo a Microsoft por un período de tiempo.
* Proporcionar a los competidores acceso a la plataforma publicitaria de Microsoft.
Sin embargo, el DOJ y la CE no quedaron satisfechos con estas concesiones. El Departamento de Justicia sostuvo que el acuerdo seguiría perjudicando la competencia, incluso con las concesiones propuestas. La CE también expresó su preocupación de que las concesiones no fueran suficientes para abordar sus preocupaciones en materia de competencia.
En julio de 2009, Microsoft y Yahoo abandonaron su propuesta de fusión. Las empresas citaron los "desafíos regulatorios" que plantea el acuerdo como motivo de su decisión.
¿La investigación antimonopolio mantuvo separados a Microsoft y Yahoo?
Es difícil decir definitivamente si la investigación antimonopolio fue la única razón por la que Microsoft y Yahoo abandonaron su propuesta de fusión. Sin embargo, está claro que el escrutinio regulatorio jugó un papel importante en la decisión. Las empresas se enfrentaban a la perspectiva de un litigio largo y costoso, y la incertidumbre sobre el resultado del litigio hizo que el acuerdo fuera menos atractivo. Además, el escrutinio regulatorio dañó las relaciones entre Microsoft y Yahoo, dificultando que las empresas alcancen un acuerdo mutuamente aceptable.
En última instancia, fue el efecto combinado de los desafíos regulatorios y las tensas relaciones entre Microsoft y Yahoo lo que llevó al colapso de la fusión propuesta.