* Ángulo de incidencia: La radiación solar golpea la tierra en diferentes ángulos dependiendo de la latitud. En el ecuador, los rayos del sol golpean la tierra en un ángulo casi perpendicular (cerca de 90 grados). Esto significa que la energía se concentra en un área más pequeña. A medida que avanza hacia los polos, el ángulo de incidencia disminuye, extendiendo la misma cantidad de energía sobre un área más grande. Esto da como resultado una menor intensidad de radiación solar.
* Duración de la luz del día: La duración del día también varía con la latitud. Las regiones ecuatoriales experimentan aproximadamente 12 horas de luz diurna durante todo el año. A medida que avanza hacia los postes, la duración del día varía significativamente, con los polacos que experimentan 24 horas de luz durante sus respectivos solsticios de verano y 24 horas de oscuridad durante sus solsticios de invierno. Esta diferencia en las horas del día afecta directamente la cantidad total de radiación solar recibida.
En resumen, la combinación del ángulo de incidencia y la duración de la luz del día conduce a regiones más lejos del ecuador que recibe menos radiación solar que las regiones ecuatoriales.