El 20 de julio de 1969, Neil Armstrong se convirtió en el primer humano en caminar en la luna. Buzz Aldrin lo siguió poco después, convirtiéndose en el segundo. Esta fue la culminación de la misión Apollo 11, un logro monumental en la exploración espacial que cautivó al mundo.
El evento fue un momento fundamental en la historia humana, marcando un importante paso adelante en nuestra comprensión del espacio y nuestro lugar en el universo.