1. Absorción:La muestra puede absorber algunos de los rayos de luz. Esto significa que la energía luminosa se convierte en otras formas de energía, como calor o energía química. Los rayos de luz absorbidos no contribuyen a la formación de una imagen.
2. Reflexión:Algunos de los rayos de luz pueden reflejarse en la superficie de la muestra. Esto puede suceder cuando el índice de refracción de la muestra es diferente del índice de refracción del medio circundante. Los rayos de luz reflejados se pueden utilizar para crear imágenes, como en la microscopía de campo claro.
3. Dispersión:La muestra también puede dispersar los rayos de luz. Esto puede ocurrir debido a irregularidades o estructuras dentro de la muestra que hacen que la luz cambie de dirección. La dispersión puede dar lugar a la formación de patrones o halos alrededor del espécimen, lo que puede resultar útil para identificar determinadas características.
4. Refracción:Cuando los rayos de luz pasan de un medio a otro con diferente índice de refracción, sufren refracción. Esto significa que los rayos de luz se curvan o cambian de dirección. La refracción puede hacer que la muestra parezca distorsionada o ampliada cuando se observa con un microscopio.
5. Difracción:La difracción es la dispersión de los rayos de luz cuando pasan a través de una pequeña abertura o alrededor de un borde. Esto puede ocurrir cuando la luz interactúa con estructuras finas o bordes dentro de la muestra. Se pueden utilizar patrones de difracción para obtener información sobre el tamaño y la forma de estas estructuras.
6. Fluorescencia:en algunos casos, ciertas sustancias dentro de la muestra pueden emitir luz cuando se exponen a longitudes de onda de luz específicas. Este fenómeno se conoce como fluorescencia. La luz emitida se puede detectar y utilizar para crear imágenes, como en la microscopía de fluorescencia.
Las interacciones específicas que ocurren entre los rayos de luz y una muestra dependen de varios factores, incluida la longitud de onda de la luz, el índice de refracción de la muestra, la presencia de moléculas absorbentes o fluorescentes y las características estructurales de la muestra. Estas interacciones son cruciales para obtener información y generar imágenes en microscopía y otras técnicas ópticas.