Una palanca es una máquina simple hecha de tres partes: dos brazos de carga y un fulcro. A veces, los dos brazos se denominan brazo de fuerza y brazo de carga, para distinguir qué brazo está iniciando el movimiento. Las palancas vienen en tres clases.
Transmisión de Torque
Las palancas son antiguas herramientas de elevación que datan de hace miles de años. Un individuo acuña una tabla bajo una carga, utiliza un punto de apoyo para darle a la tabla un punto de giro y levanta la carga aplicando fuerza en el extremo opuesto de la tabla. El producto de la fuerza y la distancia al fulcro es el torque aplicado. Si el torque aplicado a la tabla excede la carga en el otro extremo, la plancha levantará la carga.
Equilibrium
Una palanca alcanza el equilibrio cuando las fuerzas se aplican a cada uno de sus brazos, en respecto a su punto de apoyo, son lo mismo. Como regla general, cuanto más cerca está una fuerza del fulcro, menos fuerza necesita la palanca en el otro extremo para alcanzar el equilibrio. Además, la potencia de una palanca se puede amplificar o disminuir cambiando las fuerzas o cambiando la posición del fulcro, alargando así un brazo de carga y acortando otro.
Posición del fulcro
Clase- 1 palanca tiene el fulcro situado entre la carga y la fuerza. Un golpe de tambor en el patio de recreo es un ejemplo de una palanca de clase-1. Las palancas de clase 2 tienen la carga situada entre la fuerza y el fulcro. Una carretilla es un ejemplo común de una palanca de clase 2, con el fulcro en la rueda, la fuerza en las empuñaduras y la carga en la carretilla entre ellas. Las palancas de clase 3 tienen la fuerza situada entre el fulcro y el brazo de carga. Las cañas de pescar son un buen ejemplo de una palanca de clase 3, con el codo del pescador como punto de apoyo, la mano del pescador como la fuerza y el señuelo que el pescador arroja como la carga.