Los meteorólogos a los que se refiere en la televisión y en el periódico local utilizan una variedad de medidas para describir el clima actual y predecir las condiciones que verá mañana. Algunas de esas mediciones son muy familiares, como la temperatura y la velocidad del viento. Otros pueden ser un poco más confusos para el laico, pero no menos importantes en el pronóstico. ¿Un ejemplo de ello? Presión barométrica, la tendencia en la cual los meteorólogos se involucran para predecir el clima futuro.
Medición de la presión barométrica
La presión atmosférica es simplemente el peso de la atmósfera sobre la Tierra. También se llama presión barométrica porque un instrumento llamado barómetro se usa para medirla. Muchos pronósticos meteorológicos indican la presión barométrica en pulgadas o milímetros de mercurio; La presión barométrica “normal” o estándar al nivel del mar es de 760 milímetros de mercurio. Los meteorólogos, sin embargo, comúnmente usan unidades llamadas milibares para definir la presión barométrica, el estándar del nivel del mar es de aproximadamente 1,013 milibares.
La presión atmosférica disminuye con la altitud, por lo que para comparar con precisión la presión barométrica para áreas en diferentes elevaciones meteorológicas use una fórmula para corregir las mediciones a la lectura correspondiente al nivel del mar.
Alta presión
La alta presión se produce cuando una amplia columna de aire en la atmósfera se hunde hacia la superficie. Este movimiento descendente muy lento aumenta la presión atmosférica debajo del aire que cae, haciendo que la presión sea más alta que en las áreas cercanas donde el aire no se está hundiendo. A medida que el aire desciende, se calienta y contrae, lo que reduce o evita la formación de nubes. Debido a este efecto, las áreas de alta presión a menudo crean un clima claro y seco. Baja presión
Las zonas de baja presión ocurren cuando una masa de aire se eleva, como cuando el sol calienta el suelo. que cubre el aire superficial y hace que se eleve por convección. A medida que el aire se eleva más en la atmósfera, se expande debido a la disminución de la presión circundante y se enfría. El aire más frío puede contener menos vapor de agua que el aire más cálido, por lo que una vez que el paquete de aire en una celda de baja presión alcanza una cierta altitud y, por lo tanto, se enfría a una temperatura particular, su vapor de agua tiende a condensarse en nubes, y puede provocar precipitaciones y tormentas.
Presión cambiante
Las zonas de baja y alta presión se mueven a través de la superficie de la Tierra. Estas células de presión móviles crean gran parte del clima significativo que experimentamos. Los cambios en la presión atmosférica a menudo, pero no siempre, predicen el clima en los próximos días. La caída de presión sugiere que una zona de baja presión con clima húmedo y tormentoso se está moviendo en su dirección. El aumento de la presión barométrica es a menudo, aunque no siempre, una señal de que el clima pronto se despejará y se volverá justo y soleado.
Tanto las mediciones de presión barométrica ascendente como descendente son solo un tipo de evidencia sobre el clima futuro. Los meteorólogos evalúan los cambios en la presión barométrica junto con muchos otros factores para ajustar sus pronósticos.