Todo ser viviente necesita energía para sobrevivir. Los seres humanos y otros animales obtienen energía de los alimentos que comen, pero ¿y las plantas y los árboles? Las plantas verdes usan la energía del sol para crear sus propios alimentos en un proceso llamado fotosíntesis. Debido a que son capaces de hacer esto, las plantas se denominan productores, para distinguirlas de los animales, que se conocen como consumidores. Los productores y los consumidores son interdependientes, cada uno proporciona algo vital que el otro necesita.
Fotosíntesis
La fotosíntesis es un proceso mediante el cual una planta utiliza energía del sol, agua de la hidrosfera y partes del aire respiramos para producir glucosa, una molécula de azúcar compleja. Las plantas pueden conectar estas moléculas de azúcar juntas en un más largo, incluso más complejo, llamado almidón, para ser almacenadas para un uso posterior. La energía misma se almacena en los enlaces químicos que mantienen el almidón unido. Cuando se rompen los enlaces, la planta usa la energía para crecer y reproducirse.
Clorofila y cloroplastos
Todo este asombroso proceso tiene lugar dentro de las células de una planta, principalmente en su hojas. Organelos diminutos, llamados cloroplastos, es donde ocurre la fotosíntesis. Estos cloroplastos contienen un pigmento verde llamado clorofila, que les da a las plantas su característico color verde. Cuando las hojas de un árbol cambian de color, es porque la temporada de crecimiento ha terminado. La planta ha dejado de producir temporalmente clorofila y otros pigmentos en las hojas se vuelven visibles.
Entrada de productos químicos
El carbono, el hidrógeno y el oxígeno son los ingredientes químicos necesarios para que tenga lugar la fotosíntesis. El hidrógeno y el oxígeno provienen del agua de la hidrosfera. El carbono y el oxígeno provienen del dióxido de carbono que los animales y los humanos respiran en la atmósfera. Aunque no es un ingrediente químico, sin la energía del sol, no podría ocurrir nada de este proceso.
Salida Química
Cuando una planta realiza la fotosíntesis, el producto principal del proceso es la glucosa, una molécula de azúcar con la fórmula química C6H12O6. Los productos de desecho de la fotosíntesis son el agua, que se devuelve a la hidrósfera, y el oxígeno, que se devuelve a la atmósfera. Aunque podemos estar agradecidos por el oxígeno que nos permite sobrevivir, la planta no lo produce con nosotros en mente. Es simplemente un efecto secundario de la fabricación exitosa de alimentos para la planta.
Interdependencia
Los animales y las plantas son completamente interdependientes. Cuando respiramos, tomamos oxígeno para nuestros cuerpos y expulsamos el dióxido de carbono y el vapor de agua a la atmósfera. Este proceso se conoce como respiración. Cuando las plantas absorben y emiten gases, el proceso se llama transpiración. Absorben el dióxido de carbono y expulsan el oxígeno y el vapor de agua a la atmósfera. Las plantas y los animales, cada uno necesita del otro para proporcionar un elemento necesario para la vida.