1. Fusión de hidrógeno: El núcleo del sol es increíblemente caliente y denso, que contiene principalmente hidrógeno. En estas condiciones extremas, los átomos de hidrógeno chocan con tal fuerza que se fusionan, formando helio.
2. Conversión de energía de masa: Durante la fusión, se pierde un poquito de masa de los átomos de hidrógeno. Esta masa perdida se convierte en una gran cantidad de energía de acuerdo con la famosa ecuación de Einstein e =Mc², donde E es energía, M es masa y C es la velocidad de la luz.
3. Liberación de energía: Esta energía se libera como luz y calor, que irradian hacia afuera desde el sol y alcanzan la tierra, dándonos calor y permitiendo que la vida exista.
En resumen, la energía del sol proviene de la conversión de una pequeña cantidad de materia (hidrógeno) en una gran cantidad de energía a través de la fusión nuclear. Este proceso ha estado ocurriendo durante miles de millones de años y continuará por miles de millones más, impulsando nuestro sistema solar.