1. Condensación: El vapor a alta presión que sale de la turbina se dirige a un condensador. Dentro del condensador, el vapor entra en contacto con el agua de refrigeración, lo que hace que se condense nuevamente en agua líquida. Este proceso crea un vacío que ayuda a extraer más vapor a través de la turbina, aumentando su eficiencia.
2. Enfriamiento: El agua condensada, ahora a menor temperatura, se bombea a una torre de enfriamiento o a un estanque de enfriamiento. En una torre de enfriamiento, el agua se rocía en el aire, lo que permite que se enfríe mediante evaporación. En un estanque de enfriamiento, el agua circula a través de una gran masa de agua, como un lago o embalse, donde gradualmente pierde calor hacia el ambiente circundante.
3. Desaireación: Antes de que el agua condensada regrese al generador de vapor, se somete a un proceso llamado desaireación. Este proceso elimina los gases disueltos, como el oxígeno y el dióxido de carbono, del agua. Estos gases pueden causar corrosión y daños al generador de vapor y otros componentes de la central eléctrica.
4. Recalentar: En algunas centrales eléctricas, el agua condensada se puede recalentar antes de devolverla al generador de vapor. Este proceso de recalentamiento aumenta la eficiencia general de la planta al extraer más energía del vapor.
5. Rebombeo: Luego, el agua condensada recalentada o enfriada se bombea de regreso al generador de vapor. Aquí, se combina con el agua de alimentación entrante y se calienta nuevamente, convirtiéndose finalmente en vapor para iniciar nuevamente el ciclo de generación de electricidad.
6. Consideraciones ambientales: El proceso de enfriamiento descrito anteriormente utiliza una cantidad significativa de agua. Las centrales eléctricas ubicadas en regiones con escasez de agua pueden emplear tecnologías de enfriamiento alternativas, como sistemas de enfriamiento seco, que utilizan aire en lugar de agua para enfriar. Además, las centrales eléctricas deben cumplir con las normas ambientales que rigen la temperatura y la calidad del agua descargada después del enfriamiento.