Durante el lanzamiento, la combustión de los propulsores sólidos del cohete y de los motores principales del transbordador espacial libera una enorme cantidad de energía química almacenada en los propulsores. Esta energía química se convierte en:
1. Energía cinética:Los gases calientes y en expansión de los motores del cohete generan un empuje que impulsa el transbordador hacia arriba, acelerándolo a velocidades muy altas. Este aumento de velocidad le da al transbordador energía cinética, lo que le permite superar la atracción gravitacional de la Tierra.
2. Energía Térmica:El proceso de combustión y la fricción generada durante el ascenso crean un calor intenso. Esta energía térmica es evidente en las ardientes columnas de escape y en las brillantes superficies calientes de las toberas del cohete y del exterior del transbordador.
Sin embargo, es importante señalar que la cantidad total de energía en el sistema, incluido el transbordador, los propulsores y el entorno circundante, permanece constante durante todo el lanzamiento. Las transformaciones de energía ocurren cuando una forma de energía (química) se convierte en otras formas (cinética y térmica).